Feliz septiembre nuevo

Que levante la mano el que crea que todos los calendarios están mal. Que el 1 de septiembre es el nuevo 1 de enero. No nos engañemos, podemos hacer cuantas listas de propósitos queramos cada 1 de enero del calendario, pero ¿quién tiene energía en esa fecha para nada? Empieza la estación más fría, te has pasado semanas comiendo como para reventarte las arterias y ya llevas varios meses de rutina. No, el momento de los propósitos y los planes es ahora. Es septiembre.


Septiembre es el principio: la vuelta al cole, el momento en que los horarios vuelven a la normalidad, el comienzo de las clases de baile/cocina/gimnasio... Es la vuelta a la rutina tras unos meses de verano que, aunque no hayan sido sinónimo de vacaciones en muchas ocasiones para uno mismo, sí han traído consigo ese ambiente de limbo, de tregua entre el año que se acaba y el que está por venir. Tras esos meses de letargo, llega el noveno mes y con él la reactivación de la sociedad.


Este fenómeno es tan evidente e importante que en francés se ha ganado su propio nombre: "rentrée", un término que, dicho sea de paso, causa más de un quebradero de cabeza a los pobres traductores de lenguas como el español, el inglés o el alemán, que carecen de un equivalente directo. Nosotros tenemos la "vuelta al cole", la "llegada del otoño", la "vuelta a la rutina"... pero ninguno que lo englobe todo.


Aquí en Rennes, ciudad de la que estoy un poco enamorada, la "rentrée" llega como un tsunami. Da la sensación de que viviendo aquí siempre vas a ser joven. De un día para otro, te ves apretada contra el cristal del metro porque va lleno, tardas 15 minutos en atravesar el mercado el sábado porque no cabe un alfiler, no encuentras mesa para sentarte un jueves o viernes por la noche en un bar... En un plazo de dos semanas, todo llega: la gente, el frío, la lluvia, los abrigos y esa energía vibrante que se contagia sin remedio, dándote ganas de todo.

Ahora es el momento de aprovechar esa fuerza y apuntarte al gimnasio, invitar a una cerveza a esa persona, dejar de fumar, empezar a comer mejor o acostumbrarte a saludar sonriente a todos tus vecinos y compañeros de trabajo. Y si para empezar cosas nuevas tienes que terminar otras, es el momento también. El otoño trae consigo paisajes preciosos alfombrados de hojas que, ya secas, caen para dejar espacio a las que vendrán. Písalas y disfruta del ruido que hacen al crujir y deshacerse mientras piensas en todo lo bueno que te espera, aunque aún no sepas qué va a ser.

Feliz año nuevo

Comentarios

  1. Ale me ha encantado! Me has hecho el día para empezar con ánimo! Gracias y un abrazo!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Eres un amor :) ¿Cuándo vas a volver por tierras francesas? ¡Que ya es hora!

      Eliminar
  2. A tí lo que te ha hecho falta estos meses de verano son unas cuantas accras entre pecho y espalda... por eso te gusta tanto la rentrée. Dicho lo cual yo me doy por aludido y espero esa cerveza. :-)

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. ¿Quién será este tío que me comenta en el blog y encima me exige una cerveza? ¿Este sábado te parece un buen día para desvelar tu identidad?

      Eliminar
    2. Viernes, quería decir viernes...

      Eliminar

Publicar un comentario

No olvides ser respetuoso conmigo y con los demás usuarios :)

Entradas populares